jueves, 3 de septiembre de 2015

ACABA EL VERANO ¿CUÁNTO PESO? por Miguel García



Agosto es uno de los dos meses más complicado del año desde el punto de vista DEL PESO. ¿Qué motivos nos impulsan a ganar peso en verano?

- "Las vacaciones del verano" (de 151 millones de viajes realizados por los españoles en el año 2014, alrededor del 13% se realizan en verano. De todos los viajes del verano más de la mitad se llevan a cabo en agosto. Ver tabla 1)
- Consumos de alimentos típicos del verano (helados, aumento de bebidas frías con gas o alcohol en terrazas así como vermouts)
- Más salidas a restaurantes (aumento de comida rápida, pizzerías, bufete libre)
- Comidas y cenas rápidas de hacer normalmente asociada al descenso de la calidad de la comida (más carbohidratos, pizzas o bocadillos)
- Si tienes hijos, los 3 meses de vacaciones que ofrece nuestro sistema educativo que desemboca en falta de tiempo para cocinar y elaborar las comidas.
- Cambio en las horas de sueño.
- Otros motivos personales.


Tabla 1. Datos extraídos del Familitur del año 2014, la encuesta de movimientos turísticos de los españoles, realizada por la Subdirección General de Conocimiento y Estudios Turísticos perteneciente al Ministerio de Industria Energía y Turismo y que recoge los datos relativos a los viajes que realizan los residentes en Espahña.



151 millones de viajes
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92%  destino: España
8%  destino: extranjero

13,1% Vacaciones de verano
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53,9% agosto
23,9% julio
16,2% septiembre



De todos motivos están quizás el cambio en las horas de sueño es el mayor responsable de que aumentemos peso en verano. Según el Comité Español de Acreditación de Medicina del Sueño (CEAMS)los españoles duermen de media una hora menos que el resto de ciudadanos europeos”  
¿Por qué dormiremos menos que nuestros socios de la unión?

1) ¡Razones históricas pero hoy ridículas!
En 1940, en plena segunda guerra mundial, Franco decide adelantar la hora oficial de España, por cuestiones políticas, al huso horario alemán. Antes de 1940, por su posición geográfica, nuestro país se regía por el huso horario del meridiano de Greenwich, 60 minutos menos que el actual (como Londres o Lisboa). La hora oficial de España lleva, de forma incomprensible, 72 años adelantada. Nunca se ha vuelto al horario correcto, y ello ha motivado incluso que algunas organizaciones pidan volver al horario Greenwich con el objetivo de compaginar mejor el trabajo con la familia, y de paso dormir más. En invierno, España ya va una hora por delante de su tiempo solar; y en verano, al adelantarse, dos. El hecho de que sea la misma hora en Madrid que en Berlín, Estocolmo o Budapest marca drásticamente la hora de irnos a dormir. Sobre todo en el horario de verano donde nos encontramos con que en algunas zonas de España, como Galicia, anochece del todo a las 22:00h mientras que en Berlín lo hace sobre las 20:00 horas.


Los seres humanos tenemos un reloj biológico que nos indica cuando dormir y cuando despertarnos. Este reloj interno se sincroniza con el ambiente: cuando hay luz (sol) nos despierta/activa y cuando llega la noche (ausencia de luz) nos empieza a relajar para dormir. El reloj interno de los humanos no tiene sincronía con el huso horario de España. Así cuando en Galicia anochece a las 22:00 horas, el huso horario debería marcar las 20:00 y de este modo nos iríamos a dormir antes. Y para el colmo dormimos menos porque además:



2) Los españoles madrugamos lo mismo que en el resto de los países europeos, pero nos vamos a dormir más tarde. Esto se refleja incluso en el horario del prime-time en la televisión: los programas estrella de las cadenas de televisión empiezan cada vez más tarde, de manera que es casi imposible acabar de ver una película o nuestro programa favorito antes de medianoche, cuando en el resto de países europeos hace un buen rato que descansan.

3) Los horarios de trabajo más habituales en España. Para un inglés, por ejemplo, lo más usual es trabajar nine-to-five. Se entra cerca de las nueve y se está en casa para el té de las cinco. Mientras, la jornada laboral de la mayoría de españoles suele ser la famosa jornada partida. Empezamos a la misma hora, pero al alargar la pausa para comer hasta dos horas, se hace difícil salir de la oficina antes de las siete o las ocho de la tarde.

Resumiendo, tengamos vacaciones o no, en verano nos vamos a dormir más tarde, si o si.

Y, ¿qué tiene que ver todo esto con el peso?
Pues mucho ya que la hora de irse a dormir y levantarse influye en el peso.


Analizamos 3 maneras de pasar el verano



NO TENGO VACACIONES...
... pero como anochece más tarde me voy a dormir más tarde. Así desde que ceno hasta que me voy a dormir pico algo ya que pasan muchas horas y se activa el hambre. Esto provoca que al levantarme no tenga hambre y pase la mañana sin apenas comer. A consecuencia de esto llego a la comida con mucha hambre y aumento la cantidad de ingesta (como más). Este es un buen motivo para no merendar (porque no tengo hambre) y así en la cena vuelvo a comer más y normalmente peor (cojo lo primero que pillo porque tengo mucha hambre) Las cenas copiosas provocan irnos a la cama más tarde, dormir menos y peor, además de no tener hambre a la mañana siguiente. 

Este proceso día a día hace que vallamos desconectándonos de nuestra sensación de hambre y saciedad, aumentando las cantidades en las comidas y disminuyendo la calidad de las ingestas. Por otro lado psicológicamente para evitar sentirnos mal nos evadimos del presente y aparecen pensamientos recurrentes del tipo “en septiembre ya bajaré esos kilos que estoy ganando” que justifican nuestras acciones.


ESTOY DE VIAJE...
... y altero mis horarios de las comidas. Como tarde porque he realizado una larga visita (he de aprovechar el viaje) o he ido a la playa (no precisamente a primera hora de la mañana). Si como a las 15h o 16h pues no tiene sentido merendar y ceno tarde, fácilmente 5 o 6 horas más tarde, cuando tengo “el hambre voraz” activada. Ceno rápido y mucho, y a veces toma una o dos copas de alcohol. Esto y el hecho de estar de vacaciones provoca irse a dormir cada día un poco más tarde y por ende levantarse más tarde, habiendo casos donde la comida llega a ser la primera ingesta del día. 
Todo esto provoca la desregulación del hambre y los pensamientos del tipo “estoy de vacaciones y me lo merezco” dan una falsa sensación de bienestar.



ESTOY DE VACACIONES EN EL PUEBLO y modifico mis ritmos en las horas de las comidas y en el número de ingestas diarias, de nuevo por el cambio de horarios. Pero “en el pueblo” aparece otro peligroso factor: se asocia el hambre a las emociones agradables. La calidad y el tipo de comidas (mucha carne/pescado y patata frente a poco verde, cenas fuertes, alta frecuencia de carne magra..) suele estar muy ligada a los recuerdos agradables de la infancia y a nuestro sistema de creencias centrales inculcado por nuestro entorno más próximos desde que éramos pequeños (“hay que acabarse el plato”, te ofrezco mucha comida porque te quiero mucho por tanto como mucho como agradecimiento) 
Así la/s semana/s en el pueblo provocan en nuestro inconsciente que nos olvidemos de nuestros hábitos para volver a los hábitos de cuando éramos niños.



TODO TIENE UN PRECIO.
Cuando compramos algo lo pagamos 

1. Al momento (pago a la vista) 
2. En diferido (a 30 / 60 días, o en años)
En el verano solemos comprar la DESCONEXIÓN ENTRE NUESTRA MENTE Y CUERPO para podernos relajar y disfrutar de lo que nos hemos ganado todo el año. Eso incluye no atender a nuestra sensación de hambre y saciedad



La factura de las vacaciones se paga a 30 / 60 días, es decir a partir del septiembre. 
El desglose de la factura:
Aumento de peso
Descenso de la autoestima
Descontrol alimentario
Bajo estado de ánimo
Culpa
Y ahora, 
¿Qué puedes hacer? 
PUES MUCHAS COSAS Y MUY BUENAS PARA TI

La semana que viene, en el siguiente post “Septiembre. La mejor dieta postvacacional  te ofrezco algunas claves para poder manejar esta situación de un modo "psicológicamente saludable"





Además te invito a que asistas 
al próximo taller psicológico sobre alimentación:



Este taller es gratuito y se realizará la segunda quincena de septiembre en la ciudad de Barcelona. 

Puedes ver este tallerinscribirte al taller en nuestra web, o inscribirte envíanos un email aquí



Si necesitas orientación, ayuda con tu peso y sobretodo si quieres cambiar tu relación con la comida visita nuestra web www.tuespaciopsicologico.com donde te presentamos nuestro EFECTIVO programa psicológico del peso y los testimonios de una serie de personas que han realizado nuestro programa. 

Solicita tu primera visita: es gratuita donde valoramos el exceso de peso así como el peso que quieres perder. Desde la más absoluta honestidad te asesoramos e informamos sobre las opciones disponibles en el mercado y si nuestro programa se ajusta a tus expectativas. También te explicamos detalladamente el funcionamiento de nuestro programa psicológico del peso y resolvemos todas tus consultas.


Miguel García
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Psicólogo Colegiado y Coaching, especialista en Alimentación, Mindfulness,
Acompañamiento Emocional, Terapia cognitiva-conductual.
Cofundador de Tu espacio psicológico



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